La panna cotta de chocolate blanco es una receta sencilla y deliciosa que todos los amantes del dulce deben probar. Esta panna cotta es una versión más ligera y menos dulce que la original, ya que usa como ingrediente principal el chocolate blanco. Esto le da un sabor muy suave y refrescante que resulta muy agradable. Si quieres sorprender a tus invitados con un postre especial, ¡esta panna cotta de chocolate blanco es perfecta!
Para preparar la panna cotta de chocolate blanco necesitarás los siguientes ingredientes:
- 200 ml de nata para montar
- 5 hojas de gelatina
- 100 gr de chocolate blanco
- 100 ml de leche
- 50 gr de azúcar
En primer lugar, hidrata las hojas de gelatina en agua fría durante 10 minutos. Luego, calienta la leche en un cazo y añade el chocolate blanco y el azúcar. Remueve bien hasta que se disuelvan todos los ingredientes. Retira el cazo del fuego y añade la gelatina. Mezcla hasta que se disuelva por completo. Por último, añade la nata montada y mezcla.
Ahora, vierte la mezcla en moldes individuales. Déjala enfriar a temperatura ambiente durante unas 4 horas. Una vez lista, sirve la panna cotta de chocolate blanco acompañada de frutos rojos y a disfrutar del postre.
Ingredientes para preparar la Panna Cotta de Chocolate Blanco
Para preparar esta deliciosa Panna Cotta de Chocolate Blanco se necesitan los siguientes ingredientes:
- 1/2 litro de crema de leche
- 150 gramos de chocolate blanco
- 60 gramos de azúcar
- 1 cucharadita de vainilla
- 2 cucharaditas de gelatina sin sabor
Todos estos ingredientes deben estar a temperatura ambiente antes de empezar a preparar la Panna Cotta de Chocolate Blanco.
Preparación de la Panna Cotta de Chocolate Blanco
Para preparar esta Panna Cotta de Chocolate Blanco, primero debemos derretir el chocolate blanco en una olla a fuego bajo. Cuando el chocolate esté completamente derretido, agregamos la crema de leche, el azúcar y la vainilla. Removemos bien para mezclar todos los ingredientes. Luego, agregamos la gelatina sin sabor y removemos de nuevo hasta que la gelatina se disuelva completamente.
Cuando la mezcla esté lista, la colamos para asegurarnos de que no queden grumos. Luego, la vertemos en moldes individuales y la dejamos enfriar por unas horas en la nevera. Una vez que la Panna Cotta de Chocolate Blanco esté completamente fría y firme, la desmoldamos y servimos.
¡No te pierdas la oportunidad de disfrutar este exquisito postre! Si te decidiste por hacerlo, ¡no olvides compartir los resultados en tus redes sociales y etiquetarnos! Estamos seguros de que te sorprenderá lo fácil que es prepararlo y lo delicioso que queda. ¡A disfrutar!