Ingredientes
- 1 lámina de masa quebrada
- 3 huevos
- 400 g de leche condensada
- 6 cucharadas de azúcar moreno
- 100 g de nueces, molidas
- 100 g de mantequilla
- 1 cucharadita de canela en polvo
Preparación
- Precalentamos el horno a 180°C.
- Cortamos la masa quebrada y la colocamos sobre un molde para tartas. Trabajamos la base con los dedos para que quede bien ajustada.
- Ponemos la mantequilla a derretir en una cazuela a fuego medio.
- En un recipiente, mezclamos los huevos con la leche condensada, el azúcar moreno y la canela.
- Añadimos la mantequilla derretida y mezclamos bien.
- Incorporamos las nueces molidas al preparado y mezclamos bien.
- Vertemos la mezcla sobre la masa quebrada, cubriendo toda la superficie.
- Horneamos la tarta durante 40 minutos.
- Retiramos la tarta del horno y dejamos enfriar.
- Servimos la tarta de leche condensada y nueces.
Beneficios de la Leche Condensada para la Tarta de Nueces
La leche condensada es un ingrediente clave para la preparación de la tradicional tarta de nueces. Esta leche dulce y espesa se usa para crear una capa superior de dulzura y textura. Esta mezcla de nueces y leche condensada es una de las recetas más populares entre los amantes de los postres.
La leche condensada es muy nutritiva. Está hecha a partir de leche entera, por lo que contiene mucha grasa y calorías. Además, contiene una variedad de nutrientes, como calcio, potasio, magnesio, fósforo, zinc, hierro y vitaminas B1, B2, B3, B6 y B12. Esta mezcla de nutrientes es ideal para complementar la fortaleza de las nueces y aportar una cantidad adicional de proteínas.
Además, la leche condensada proporciona una textura cremosa y una capa de dulce sabor a la tarta de nueces. Esta mezcla de leche condensada y nueces se mezcla con huevo, harina y una mezcla de especias para crear una masa suave y deliciosa. Una vez que se hornea, la leche condensada se derrite y forma una capa superior suave y brillante. Esta capa superior le da un toque de dulzura perfecto a la tarta de nueces.
La leche condensada también proporciona una variedad de beneficios para la salud. Esta leche dulce contiene una gran cantidad de calcio, que es esencial para la salud ósea y la prevención de la osteoporosis. Además, contiene una gran cantidad de proteínas, que ayuda a desarrollar y mantener músculos fuertes. La leche condensada también es una excelente fuente de energía, por lo que es ideal para aquellos que buscan obtener una buena cantidad de calorías sin sacrificar los sabores.
Cómo seleccionar las Nueces para la Tarta de Leche Condensada
Las nueces son un ingrediente clave para preparar una deliciosa tarta de leche condensada. Estas nueces son ricas en nutrientes y proporcionan una cantidad adicional de sabor y textura a la tarta. Las nueces se mezclan con la leche condensada para crear una masa suave y deliciosa.
Es importante elegir las nueces adecuadas para preparar la tarta de leche condensada. Hay varios tipos de nueces disponibles en el mercado, como nueces de macadamia, nueces de Brasil, nueces de la India, nueces de Pekín y nueces de California. Cada uno de estos tipos de nueces tienen un sabor y textura únicos. Los chefs recomiendan usar una mezcla de varios tipos de nueces para obtener una tarta de leche condensada con un sabor único.
Además de elegir el tipo de nueces adecuado, es importante seleccionar nueces frescas para la tarta de leche condensada. Esto es especialmente importante si está usando nueces crudas. Las nueces crudas deben estar sin sal, sin cáscara, y sin manchas. Esto garantizará que las nueces tengan el mejor sabor y textura.
Para asegurarse de que las nueces estén completamente frescas, es importante comprarlas en una tienda de alimentos saludables o en una tienda de alimentos orgánicos. Estas tiendas ofrecen productos de calidad, lo que garantiza que las nueces sean frescas y de buena calidad. Además, es importante almacenar las nueces en un lugar fresco y seco para garantizar que tengan el mejor sabor y textura.
Cubriendo la tarta con nueces
Ahora para darle el toque final a la tarta de leche condensada y nueces, vamos a cubrirla con una capa de estas últimas. Lo primero que haremos será triturar unas cuantas nueces en una picadora. Si no tienes una, no hay problema, puedes usar una simple cuchara para trocearlas en trozos pequeños.
Una vez tengamos la tarta lista para ser cubierta, esparceremos sobre ella los trozos de nueces. Para conseguir una decoración uniforme recomendamos ir moviendo la tarta para que los trozos se extiendan por toda la superficie.
Cuando hayamos cubierto toda la tarta con los trozos de nueces, podemos añadir algunas nueces enteras. Para ello, simplemente colocaremos algunas por encima de la superficie de la tarta de forma que queden bien distribuidas.
¡Y listo! Ya tenemos nuestra tarta de leche condensada y nueces lista para servir y disfrutar.