Ingredientes:
- 2 manzanas
- 2 láminas de hojaldre
- Azúcar moreno, al gusto
- Canela, al gusto
- 1 huevo para pintar
- 2 cucharadas de mantequilla
Preparación:
- Pon el azúcar moreno y la canela en el vaso de la thermomix y programa 5 segundos/velocidad 5. Reserva.
- Añade las manzanas al vaso y programa 5 segundos/velocidad 5. Añade el azúcar y la canela reservados previamente y programa 5 segundos/velocidad 5.
- Coloca una lámina de hojaldre en una bandeja para horno, previamente engrasada con mantequilla. Reparte la mezcla de manzana por encima. Cubre con la otra lámina de hojaldre.
- Corta los bordes de la tarta con una cuchilla y cierra los bordes con los dedos, para que la mezcla de manzana no se salga. Pinta con huevo la parte de arriba de la tarta y hornea en el horno previamente calentado a 180°C durante unos 20 minutos aproximadamente.
- Retira del horno y deja enfriar antes de servir.
Técnicas para cortar la manzana para la tarta
Cortar la manzana para la tarta puede ser un poco complicado si no se hace correctamente. La clave es tener la manzana en una sola pieza para que se conserve su forma y su textura durante el horneado. Para conseguir esto, hay que tener en cuenta algunas técnicas específicas para cortar la manzana.
Primero, hay que lavar la manzana para eliminar los residuos de pesticidas y para limpiar la piel. Luego, hay que pelar la manzana con un pelador de manzanas para conservar su forma. Asegúrate de retirar toda la piel para que no se queden trozos en la superficie de la tarta. Una vez pelada, la manzana se corta en rodajas finas. Para que las rodajas sean del mismo grosor, es recomendable usar un cuchillo afilado y tener una superficie de corte firme. Puedes marcar la manzana con unas líneas ligeras para poder guiarte al cortar.
Una vez cortadas las rodajas, hay que prestar atención a la forma en que se colocan para que se mantenga la forma y la textura durante el horneado. Para esto, es importante que las rodajas se coloquen en una sola capa y que se respeten las formas naturales de la manzana. También es recomendable que se añadan algunos ingredientes como una pizca de canela, una pizca de azúcar moreno, una pizca de ralladura de limón o unas gotas de zumo de limón para añadir sabor y aroma a la tarta.
Consejos para el hojaldre de la tarta de manzana
El hojaldre es una parte esencial de la tarta de manzana. El hojaldre debe ser fino, crujiente y con una textura suave al paladar. Para conseguir este resultado hay que prestar atención a algunos consejos para trabajar bien la masa.
Primero, hay que congelar el hojaldre antes de estirarlo. Esto evita que la masa se vuelva demasiado elástica y que se pierda la textura crujiente durante el horneado. Después, hay que estirar el hojaldre en una superficie plana. Se recomienda usar un rodillo para estirar la masa sin que se pegue a la superficie de trabajo. Una vez estirada, hay que prestar atención a los bordes. Para conseguir el efecto crujiente y fino del hojaldre, hay que enrollar los bordes con los dedos y luego, con un cuchillo afilado, hay que hacer unos cortes finos.
Una vez listo el hojaldre, hay que colocarlo en un molde y rellenar con la manzana. Después, hay que añadir una capa de azúcar moreno para que se forme una costra caramelizada durante el horneado. Finalmente, hay que cubrir el hojaldre con una capa fina de mantequilla para que el hojaldre quede crujiente y con un toque suave.
Preparación de la masa
Para preparar la tarta de manzana con hojaldre en la Thermomix, lo primero que debemos hacer es preparar la masa. Esto es muy sencillo y solo necesitaremos un puñado de ingredientes: harina, mantequilla, sal, agua y azúcar.
Lo primero que debemos hacer es poner en el vaso de la Thermomix 200 g de harina, 100 g de mantequilla, una pizca de sal, 70 g de agua y 20 g de azúcar. Mezclamos todos estos ingredientes a velocidad 5 durante unos segundos hasta que obtengamos una masa homogénea.
Una vez tengamos la masa, la sacamos del vaso de la Thermomix y la amasamos con las manos. Debemos amasar hasta lograr una masa lisa y homogénea.
Cuando hayamos conseguido que la masa quede lisa, la rodeamos con un film transparente y la dejamos reposar en la nevera durante 30 minutos.
Una vez pasado el tiempo, sacamos la masa del frigorífico y la extendemos con un rodillo sobre una superficie enharinada. De esta forma conseguiremos que el hojaldre sea fino y crujiente.
Una vez tengamos la masa preparada, ya estamos listos para montar la tarta.
